Un 13 de septiembre como hoy: nublado, gris, incierto, falleció un hombre víctima de cáncer de páncreas entre las blancas sábanas de un hospital limeño. Aquel hombre murió sabedor de haber engendrado "bellezas recónditas y sutiles" que lo han hecho inmortal más allá de la carne y los in-clementes detractores. Ese hombre expiró con un libro de Poe sobre el buró de su cuarto de hospital, el último que leyó; dejó la vida de la mano del maestro, rodeado de sus brumosas mujeres y siniestros hombres.

Hace 63 años un hombre pidió a sus hijas leer a Edgar Allan Poe en el que sería su lecho de muerte, él apenas podía sostener el libro pues sus manos temblaban como ya poseídas por la muerte.

Algunos días después de que el hombre partiera con Lina, Alicia, Lodoiska, Cordelia, Leticia, Astarté y sus vampiras, alguien ojeó el libro de Poe en la casa de Miraflores y descubrió la fecha "13 de septiembre, 1946" escrita con la letra firme de cuando el hombre era joven. Clemencia cree que él pudo vaticinar la fecha de su muerte...



Ese hombre, quien conoció la vida y la muerte, para quien la muerte es vida, no es otro que Clemente Palma, el siniestro, el gótico, el decadente, el entusiasta de la ciencia ficción, el periodista que no dudaba en decir sus verdades a la gente, el gestor cultural, el padre, lector, escritor, amigo, fantasma...

Hagamos algún día una sesión espiritista para que, como en esa hermosa novela, aparezca rodeado de un aura verde y se ría de nosotros.

Descansa en paz, maestro.


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Cartelera

El universo recordará el 63 aniversario de la muerte Clemente Palma durante la próxima semana, así que cuando miren un sitio refulgente en el cielo no crean que se trata de pipí astronáutica, sino de la Vía Láctea y sus siniestra delectación por leer los Cuentos malévolos. Así que quienes vivan lejos de las ciudades y tengan un espacio de bóveda sin nubes después de la media noche (al rededor del 18 de septiembre) no duden en voltear al cielo y beber una copa de absintio a la salud de las bellezas recónditas y sutiles del peruano que incluso aparece en los sueños de Alos.